El día 7 de Noviembre estuve en el Palau de la Música en Barna escuchando el concierto rememorando el mítico disco de Miles Davis ya un clásico y por cierto libre de derechos de autor pues los 50 años no se los quita nadie,,,,, siempre es una delicia escucharlo y la banda que actuó tocaba de maravilla pero igual intentaba ser demasiado fiel, demasiado imitativo sin decir nada nuevo.... igual era un homenaje lo más literal posible y se consiguió...
Pero lo que me mueve a escribir este artículo es otra cosa, siempre me ha llamado la atención la manera de acercarse al Jazz que hay por territorio europeo, parece que tenga que ser una experiencia intelectual y cuánto mas mejor... me resulta extraño ese alejamiento de la emoción, del baile, del instinto , del disfrute.... y me incomoda no poder disfrutar del todo de esa música afroaméricana en un teatro donde todos están serios, formales como en un concierto de música clásica, donde se te mira mal si te mueves, sigues el ritmo..... ese no es mi acercamiento al Jazz que siempre fue más intuitivo,cercano, alegre....si, siempre me resulta extraño disfrutar de esta música en un teatro formal..... y muy muy serio e intelectualoide..Uffff
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